Lo que hizo la esposa del CEO infiel tras ser expuesto en pleno show de Coldplay dejó a todos hablando

La escena fue tan sorpresiva como inesperada. Durante un concierto de Coldplay en Boston, las cámaras del estadio enfocaron a una pareja que parecía disfrutar del momento con ternura. Sin embargo, lo que parecía un instante romántico tomó un giro radical cuando ambos mostraron señales claras de incomodidad al verse en pantalla gigante. Lo que nadie imaginaba es que esa escena daría pie a un escándalo viral que aún sigue generando repercusiones.

En cuestión de horas, usuarios en redes sociales se encargaron de identificar a los protagonistas: Andy Byron, CEO de la empresa Astronomer, y su colega Kristin Cabot. Según lo que circuló rápidamente en internet, ambos mantienen relaciones sentimentales con otras personas, lo que llevó a muchos a suponer que lo que ocurrió en el concierto era más que una simple muestra de afecto entre amigos.

Desde ese momento, la historia no dejó de crecer en redes. Y ahora, un nuevo capítulo ha captado la atención: la supuesta esposa del ejecutivo fue señalada por internautas como una figura clave en el drama. Varios usuarios comenzaron a compartir capturas del perfil de Facebook de una mujer identificada como Megan Kerrigan Byron, quien, hasta hace poco, llevaba el apellido de su esposo en su cuenta personal. Sin embargo, tras la difusión del video del concierto, esa referencia desapareció de su nombre visible.

Este detalle, aparentemente menor, fue interpretado por muchos como un gesto simbólico de distanciamiento. Aunque no se ha confirmado de forma oficial si se trata efectivamente de la esposa de Byron, la coincidencia temporal con el estallido del escándalo y la eliminación del apellido despertaron fuertes especulaciones. En la imagen de portada de su cuenta, se la ve sonriendo junto a dos hombres en un campo de golf, una postal que también fue analizada con lupa por los internautas que siguen cada paso del caso.

Lo ocurrido en el show de Coldplay fue el punto de partida de esta controversia. La reacción de Byron y Cabot al verse en pantalla no hizo más que intensificar las sospechas. Él bajó la cabeza de inmediato, mientras que ella intentó taparse el rostro, generando una ola de comentarios sobre la naturaleza de su vínculo. Poco después, las redes hicieron lo suyo y no tardaron en revelar nombres, cargos e incluso estados civiles.

Ahora, con la aparente respuesta de la esposa, el foco del público se ha desplazado hacia las consecuencias personales que esta situación podría tener para los involucrados. El mundo digital, una vez más, expuso algo que ocurrió en un contexto privado, convirtiéndolo en una historia de alcance masivo. Sin necesidad de declaraciones oficiales, pequeños cambios como una modificación en un nombre de perfil se transforman en señales leídas como respuestas emocionales ante una situación que se volvió pública sin consentimiento.

Mientras el tema sigue siendo tendencia en redes sociales, muchos se preguntan si alguno de los protagonistas hablará públicamente sobre lo ocurrido. Por ahora, los gestos silenciosos, como el presunto cambio en el perfil de Megan, son los únicos indicios de cómo este episodio ha afectado a su entorno más cercano. La historia, lejos de cerrarse, continúa generando eco en internet.