Una profesora de 62 años fue arrestada tras confesar la muerte de su novio de 21 años
Un impactante caso ocurrido en el interior del estado de San Pablo, Brasil, ha generado una fuerte conmoción en la comunidad. Una mujer identificada como Jussara Luzia Fernandes, de 62 años, fue detenida por las autoridades luego de admitir que había causado la muerte de su novio, Alex Sandro da Silva Rocha, de 21 años, y posteriormente enterrado su cuerpo en el patio de su vivienda.
La historia salió a la luz luego de una denuncia anónima que alertó a la policía sobre un posible crimen en una residencia del barrio Eldorado, en la ciudad de Bebedouro. Cuando los agentes acudieron al lugar, notaron que las declaraciones de la mujer eran inconsistentes, lo que despertó sospechas inmediatas.
De acuerdo con el secretario de Seguridad Pública, Rogério Valverde, en un primer momento la profesora negó cualquier delito. Sin embargo, los policías observaron un pozo reciente en el patio trasero, y al preguntarle al respecto, ella respondió que era para enterrar un perro. Poco después, terminó confesando que el cuerpo de su pareja se encontraba allí, lo que llevó al hallazgo del joven.
La mujer relató que el episodio ocurrió durante la semana, luego de una fuerte discusión con Alex Sandro. Según su testimonio, el enfrentamiento se tornó violento y ella tomó una tijera para defenderse, causándole heridas fatales. Aseguró que actuó por miedo y desesperación. Más tarde, en estado de shock, decidió ocultar el cuerpo y habría contratado a alguien para que cavara el pozo donde finalmente lo enterró.
El comisario João Vitor Silvério, responsable de la investigación, informó que la sospechosa podría haber contado con la ayuda de uno de sus hijos para mover el cuerpo antes de enterrarlo. El Cuerpo de Bomberos y la Policía Civil trabajaron en conjunto para recuperar los restos del joven, mientras la investigación continúa abierta.
Por su parte, la madre del joven, Ivonete Ribeiro da Silva, declaró a medios locales que su hijo era víctima de una relación controladora y abusiva. “Incluso cuando iba al baño, la puerta estaba abierta. Ella lo vigilaba constantemente, no podía usar el teléfono libremente y había bloqueado a toda su familia”, aseguró. Ivonete también mencionó que su hijo era un joven fuerte, de 1,88 metros de altura, y que no cree que la profesora haya actuado en defensa propia. “Estoy convencida de que lo drogó para dejarlo indefenso”, afirmó.
Según el entorno del joven, Alex mantenía una relación complicada con Jussara, marcada por los celos y el aislamiento. Aunque sentía afecto por ella, le había manifestado a su familia que quería separarse porque ya no soportaba los constantes conflictos. Su madre incluso reveló que la mujer había llegado a atropellarle un pie con el auto, pero él se negó a denunciarla.
El caso tomó un giro aún más inquietante cuando se reveló que Jussara Luzia Fernandes había quedado viuda en enero de este mismo año. Su esposo, Walter Gilmar de Pádua Carneiro, fue hallado sin vida en la piscina de su domicilio. En ese entonces, la muerte fue considerada accidental, pero la nueva investigación podría cambiar esa versión.
La hija del fallecido, Bruna Carneiro, aseguró que su padre también tenía conflictos con la profesora y que había manifestado su intención de terminar la relación, aunque temía por su seguridad. Tras los recientes acontecimientos, las autoridades informaron que reabrirán la investigación sobre la muerte de Walter para analizar si ambos casos guardan alguna relación.
Por ahora, Jussara Luzia Fernandes permanece detenida, mientras los investigadores recopilan pruebas y declaraciones que permitan esclarecer lo sucedido. La comunidad de Bebedouro se encuentra conmocionada por la magnitud del caso, que ha expuesto una trama de violencia, secretos y posibles engaños que podrían involucrar más de una muerte.
La justicia brasileña determinará en los próximos días los pasos a seguir, mientras la familia de las víctimas reclama verdad y justicia por los hechos que hoy sacuden a todo el país.